sábado, 11 de octubre de 2014

La Poliomielitis Y El Presidente Roosevelt



Franklin Roosevelt fue el 32.º presidente de los Estados Unidos de América (Nueva York, 1882 - Warm Springs, Nevada, 1945). Era pariente del también presidente Theodore Roosevelt, y, como él, había estudiado en Harvard y había sido subsecretario de Marina (1913-20); pero, a diferencia de él, Franklin se alineó con el Partido Demócrata. Era abogado, aunque abandonó muy joven la profesión para dedicarse a la política. Fue elegido senador (1911) y gobernador del Estado de Nueva York (1928), destacando su política de lucha contra la pobreza.
En agosto de 1921, mientras la familia Roosevelt estaba de vacaciones en la isla de Campobello, New Brunswick, Franklin enfermó con poliomielitis, una infección viral de las fibras nerviosas de la columna vertebral, que probablemente contrajo nadando en el agua estancada de un lago cercano. El resultado fue que Roosevelt se quedó total y permanentemente paralizado de cintura para abajo. Al principio, los músculos de su abdomen y la parte más baja de la espalda también se vieron afectados, pero más tarde se recuperaron. De esta forma, podía levantarse y, con la ayuda de muletas, mantenerse de pie, pero no podía andar.  


Pese a que la parálisis por la polio no tenía cura (y, actualmente, sigue sin tenerla aunque es muy rara la infección por esta enfermedad en países desarrollados), Roosevelt rechazó durante toda su vida que estaría permanentemente paralizado. Probó con numerosos tratamientos, pero ninguno tuvo ningún efecto. No obstante, estaba convencido de los beneficios de la hidroterapia y, en 1926, compró un resort en Warm Springs, Georgia, donde fundó un centro de hidroterapia para tratar a los pacientes infectados por la polio, el cual continúa abierto y se llama Roosevelt Warm Springs Institute for Rehabilitation (con un objetivo aún más extenso) donde pasó mucho tiempo durante la década de los 20. Esto lo hizo en parte para escapar de su madre, la cual trató de recuperar el control sobre su vida mediante el seguimiento de su enfermedad.

La silla de Roosevelt

En una época en que las intromisiones de la prensa en la vida privada de personajes públicos era mucho menos intensa que hoy en día, Roosevelt fue capaz de convencer a mucha gente de que estaba recuperándose, lo que pensaba que era esencial para retornar a la política. (La Enciclopedia Británica, por ejemplo, dice que "por medio de cuidadosos ejercicios y tratamiento en Warm Springs, está recuperándose paulatinamente", aunque esto no fue cierto en absoluto.) Sujetando sus piernas y caderas por medio de abrazaderas de hierro, aprendió a caminar distancias cortas girando su torso mientras se apoyaba con un bastón. Usaba silla de ruedas en la intimidad, pero se cuidó mucho de no ser visto en público con ella, aunque en ocasiones apareció con muletas. Normalmente se mostraba de pie, mientras se apoyaba en un lado sobre uno de sus hijos. Pese a lo poco que le gustaba verse así, su estatua en silla de ruedas fue instalada en el Monumento a Franklin Delano Roosevelt en la ciudad de Washington.

Sources: http://discapacidadrosario.blogspot.mx/2010/10/franklin-delano-roosevelt-y-la-polio.html (11 de Octubre de 2014)

No hay comentarios:

Publicar un comentario